No dimos la campanada en Coslada, no. No fuimos capaces de hacer una heroicidad y robarle a Camioneros una victoria en su casa. Los azules cabalgan imparables a por el título de campeones de una Liga en la que no deberían estar, salvo que hubieran querido compaginarla con una competición nacional, que es lo que por nivel les corresponde. Nosotros, por nuestra parte, aunque no dimos la mayor de las sorpresas, sí que hicimos unas pocas de cosas bien, y esas son precisamente en las que queremos fijarnos.
El primer cuarto fue una auténtica pasada. Conscientes de la dificultad del reto y con la motivación por las nubes, salimos al campo a darlo todo sin complejos. Camioneros sacó su plan de partido a la palestra nada más comenzar. No huddle offense y a machacarnos por puro físico, que para eso eran el doble de tíos que nosotros (envidia, mucha envidia hay en estas palabras, que no excusas). La defensa comenzó aguantando el tipo como pocas veces lo han hecho. Estábamos parando a Camioneros a base de cabezonería y aguante, y eso tiene mucho mérito. El ataque, por su parte, lo tenía más difícil. Mover cadenas frente a la defensa de Coslada era difícil, aunque Pantera #18 conseguía completar algunos pases y sigue acumulando experiencia en el que es ya su segundo partido como quarterback titular.
Los primeros puntos de Camioneros llegaron, por desgracia, en un despiste de la defensa. Falló la cobertura profunda y el QB de los locales conecta un pase largo para subir los primeros 6 puntos al marcador. El intento de fake field goal fue parada y el primer cuarto duró poco más. En el segundo volvimos a recuperar la tensión defensiva. Algún placaje en back field, un gran sack en el que hasta tres Jabatos se comieron al QB local y hasta una intercepción de Bernabéu #1 que dejó en buena posición a nuestro ataque. Pero la defensa de Coslada seguía siendo mucha tela.
Al final, la lógica se impuso y tanto estaba yendo el cántaro a la fuente, que se rompió. Camioneros llegaba a nuestra yarda 3 y, allí, dos QB Sneak les valían para hacer subir un tuchdown más al marcador. En el siguiente drive una intercepción les dejaba una posición de campo excepcional que también supieron aprovechar rápidamente. Y apenas unas jugadas después, cayó una anotación más de los locales. La falta de oxígeno y la desesperación parecían habernos metido en un bucle muy complicado, pero por suerte llegó el descanso y con el 26-0 en el marcador, pudimos ir a coger aire.
La defensa, a pesar de los 46 puntos encajados, realizó un esfuerzo grupal tremendo
No lo estábamos haciendo nada mal, sinceramente. Hasta que cayeron los tres touchdowns como tres gotas de agua fría, estábamos aguantando el tipo, aun siendo conscientes de nuestra inferioridad. El plan para el segundo tiempo era seguir luchando mientras las fuerzas aguantaran y, después, un poco más.
Así que con esa intención salimos al campo y, de nuevo, dimos todo lo que teníamos. Debutó con el equipo senior Javi, del junior, y Álex sumó su segundo partido seguido con los mayores. Cada día estamos más orgullosos de nuestra cantera y del currazo que están haciendo los chavales. Pero ni ellos, ni nadie, lograron evitar un nuevo touchdown de Camioneros. Conseguimos clavarles en su propia yarda 5 con un gran punt de Julen #32, Charly #54 rozó el safety fallando un placaje en la end zone y, al final, un bombazo largo del QB de camioneros les dio el touchdown de (MUY) Big Play.
Todavía habría tiempo para una anotación más de camioneros antes del cambio de cuarto. Un retorno de punt inmenso que nos comimos como si no hubiéramos desayunado con un fake en el intento de extra point que también nos comimos, de postre. En el último cuarto Camioneros aún anotó un nuevo touchdown y dejó el 46-0 final en el marcador, aunque eso no nos impidió vivir un poco de emoción todavía y tener nuestro mejor momento ofensivo del partido.
Un drive largo con primeros downs de carrera y de pase. Algún pañuelo amarillo también contribuyó a acercarnos a la end zone rival y, al final, Camioneros tuvo que volver a sacar a su defensa titular al campo. Al final, cuarto down en la yarda 21 de Camioneros y equipo de field goal al campo. Buen snap, buen hold, aguantó bien la línea y la patada salió fuerte y alta… aunque ligeramente desviada. Y ahí, a escasos metros de la portería y con apenas un minuto por jugar, terminaba el partido.
Derrota esperada, pero buena pelea, orgullo y muestras de las cosas grandes que podríamos hacer si fuéramos más o más constantes entrenando. Solo depende de nosotros luchar contra nuestros límites, superarlos y acabar con ellos. Quedan dos partidos de esta LMFA y, gracias a los últimos resultados en otros encuentros, dependemos de nosotros mismos para quedar subcampeones. Queda mucho football y mucha lucha aún por delante, ¡Vamos a por todas!
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