Mientras los ojos de todo el planeta football estaban pendientes de los Brady, Manning, Newton y compañía, nosotros íbamos de otro rollo durante las primeras horas del domingo. Por primera vez esta temporada no tocaba madrugar para jugar el partido y el viaje a Arganda para enfrentarnos a los Blackhawks se hizo más agradable, con unas buenas horas de sueño en el cuerpo. El buen rollo era tanto que hasta los señores referees tuvieron que pedirnos por favor que bajáramos la música en el vestuario y es que teníamos tantas ganas, estábamos tan animados…
Desde el coin toss parecía que la suerte nos sonreía. Victoria en el sorteo, elegimos recibir, quince yardas de penalización para Blackhawks por no tener la ambulancia en su sitio a tiempo y nuestros special teams sobre el campo, afilando los colmillos, listos para comenzar la batalla. Gran retorno de Lenin #33, que deja al ataque en la yarda 30 de Arganda para comenzar. Sale la ofensiva al campo y apenas necesitan un pase y dos carreras cortas para que Martín #23 atraviese la end zone por primera vez. Un terrible long snap (marca de la casa jabata) provocó que Lenin tuviera que correr por su vida para saltar sobre dos defensas locales y así colocar el 0-8 en el marcador con una conversión de dos puntos espectacular.
La defensa tomaba el relevo del ataque y el nivel mostrado fue similar, si no mejor. Ticona #24 se puso las botas desde la posición de defensive end. Rara era la jugada que no se llevaba por delante a un corredor de Arganda y los tres y fuera se sucedían uno tras otro. Los snaps por encima de la cabeza del QB local no ayudaban a la fluidez de su juego pero, a diferencia de otros días, allí estábamos nosotros. Rabiosos, luchadores, disciplinados. La primera mitad mantuvo una tónica similar casi constantemente.
Martín volvió a anotar y, tras él, poco después, le llegó el turno a Julen #32. Nuestro fullback se puso las botas y fue un puñal en el centro de la defensa local. Tras estos drives anotadores llegó el único punt que tuvimos que hacer en todo el partido (tremendo el ritmo, constancia y efectividad de nuestra ofensiva) y, para alegría del ataque, un mal catch del retornador terminó en fumble recuperado por Bernabéu #1. Nueva oportunidad para el ataque y, esta vez sí, nuevo touchdown. Sergio para Sergi. Bonati #18 contactó con el TE más en forma que tenemos, Sergi #12, que rompió un par de placajes y atravesó la endzone con media defensa encima. Para culminar el cuarto, un buen scramble de Bonati situó el 33-0 en el marcador (Charly #54 convirtió un extra point).
La segunda parte se jugó a tiempo corrido (alguien tenía prisa, que no quería perderse los Play Offs) y no tuvo mucha más historia que la primera. Los locales lo dieron todo, tiraron de orgullo, lucharon con todo su espíritu y más pero no eran capaces de superarnos. Sacaron algún primer down, forzaron a nuestro ataque a algún tercer y cuarto down, pero no pudieron. Dos touchdowns más de Martín y otro extra point de Charly colocaron el 0-46 en el luminoso y así se llegó al tercer cuarto. Una última oportunidad tuvieron los locales de estrenar su marcador y recompensar sus esfuerzos. Una intercepción de su defensa, con retorno hasta nuestra yarda 20 ponía contra las cuerdas a la defensa. La disciplina y el trabajo de los nueve jabatos que estaban sobre el verde en ese momento evitó cualquier posibilidad de anotación y un posterior drive de ataque se quedó corto de tiempo para llegar a la end zone.
Lo mejor del partido, y por eso esta crónica es tan poco modesta, si se nos permite por una vez, fue la gran intensidad mostrada desde el primer hasta el último snap del partido. Un compromiso férreo entre ataque y defensa. Una constante de jabatos luchando desde el primer segundo hasta el último pitido. Pocas veces a una victoria hemos podido ponerle tan pocos peros. Que nos sirva para marcar el camino de lo que resta de liga y que esta actitud renovada y comprometida nos llene el casillero de victorias.
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